El
seitán, es el gluten del trigo o proteína del trigo, contiene todos los
aminoácidos esenciales y un contenido
proteico (24,7%) similar al tofu o el tempeh, y un poco más que la carne (entre
un 18% y un 22%). Se le suele llamar
"carne vegetal" ya que su textura, olor, sabor y consistencia se
asemejan a la carne, y con todas las ventajas de no contener colesterol, ni
antibióticos, ni hormonas. Además, se puede cocinar de la misma manera, se puede
estofar, rebozar, freir, para sopas, caldos y cocidos, hacer al horno, hacer a
la plancha, para canelones, albóndigas, para hacer bocadillos, etc.
Es
de buena digestión y muy reconstituyente, sobretodo para los niños, ancianos,
embarazadas, diabéticos (apenas contiene
hidratos de carbono) y personas débiles. Una ración de 180 gramos al día y con
solo 140 Kcal, cubre casi todas las necesidades proteicas diarias.
El
gluten está contenido en los siguientes cereales: trigo, avena, cebada y
centeno. Sus valores nutricionales por 100 gramos son los siguientes:
- Energía: 114Kj/482Kcal
- Proteínas: 24,7g
- Hidratos de carbono: 3,55g
- Grasas: 2,06g (De las cuales ácidos grasos saturados: 0,45g)
- Fibra: 2,08g
- Sodio: 0,20g
Entre las virtudes de la proteína vegetal, es que al descomponerse no produce putrescina, ni cadaverina, sustancias orgánicas que sí genera la carne animal en su descomposición. Un animal se pudre, un vegetal fermenta. El proceso de descomposición vegetal en el intestino es mucho más beneficioso y saludable.
El seitán es un alimento que lo podemos preparar en casa, pero se vende ya envasado.
Al
ser gluten, es muy importante que las personas celíacas no lo consuman.